Hace chispear hasta la tragedia …
(…) Claude Troxler es uno de los creadores
que nos deja a menudo estupefactos y admirativos.
Fue mi caso hace unos veinte años cuando
vi las obras del que era aún un principiante
(…).
Troxler engaña: es un hombre agradable,
simpático y sonriente cuya mirada brilla
de cordialidad; pero el pintor es ansioso, febril,
totalmente animado por un sentimiento de búsqueda.
Claude Troxler, a la vez dinámico, apasionado
aunque siempre en alerta, es en la pintura el
digno representante del aventurero. Apasionado
por las ideas que medita y desarrolla (…)
consigue hacer chispear hasta la tragedia, ya
que permanece fiel a sus formas rítmicas,
a su armonía de transparencias, de colores
de esmalte colocados con fluidez. Su dualidad
le persigue a través de sus colores con
una sencillez natural, gracias a su enloquecedor
figurativo, hecho de movimiento, de luz, con
lo justo de audacia, de singularidad y donde
la aparente tortura del creador se transforma
en poesía del gesto y de la vida.
André RUELLAN,
critique d'art